domingo, 20 de febrero de 2011

"los más débiles, los de aquí y los de lejos"

En tiempos como éstos, de crisis económica, se podría llegar a pensar que la prioridad es preocuparse por "los pobres de aquí". Pero, la realidad es que resulta inconcebible abandonar a los más débiles, los de aquí y los de lejos, cuando más lo necesitan.
Tenemos la gran suerte de vivir en un lugar dónde, a pesar de todas las crisis y dificultades de la economía, todos los niños van a poder asistir a la escuela y van a tener acceso a un médico cuando se pongan enfermos. Incluso cualquier chico o chica joven con ganas y capacidad para ello podrá llegar a la universidad. Y saltan las alarmas y se trata de poner remedio cuando esto no sucede así.
Sin embargo, no ocurre lo mismo en todas partes y no podemos volver la vista anete esto: niños que deben abandonar sus estudios para vender zapatos usados en la calle o para andar buscando chatarra, pues este es el único medio de subsistencia de sus familias, o que no pueden ir al médico porque no lo hay o es demasiado caro.
En el año 2000 las Naciones Unidad aprobaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio, para conseguir reducir a la nitad la pobreza extrema y el hambre en el año 2015. Sin embargo, la crisis económica y financiera internacional ha acabado con las buenas intenciones. Y cada vez son mayores las diferencias entre unos países y otros, entre unos lugares y otros, entre ricos y pobres.
Desde Proyectos Solidarios de Los Rosales seguimos tratando de acercar esta realidad de pobreza que, no por estar más lejos, es menos injusta. Tratamos también de, en la medida de nuestras posibilidades, poner nuestro granito de arena en la construcción de un mundo más justo: con el apadrinamiento de niños, con una beca universitaria, con nuestra ayuda en catástrofres naturales, con huertos familiares...
(Artículo para el boletín de Cuaresma de la Hermandad del Cristo de la Expiración 2011)